UN MIRADOR HACIA EL VALLE
Nuestras premisas de partida fueron las siguientes: espacios amplios para el desarrollo de la vida familiar, en el exterior y el interior, estancias cómodas y prácticas destinadas al descanso.
Sobre la construcción original se propuso añadir un pabellón de caza, un amplio porche y una galería acristalada que envuelven la parte antigua de la casa dándole un juego de volúmenes y materiales que rompen con su simetría original creando espacios muy agradables desde dónde disfrutar de las impresionantes vistas del valle.